Hace 10 años decidí estudiar la carrera de Nutrición. Los que la estudiaron y ahora se dedican a eso, no me dejarán mentir que es una profesión muy hermosa; estudiar la salud del ser humano desde la alimentación, fue sin duda alguna una gran sorpresa. Me llené de mucho conocimiento y lo disfruté hasta el último minuto. Sin embargo, al finalizar los años de estudio me enfrenté a la realidad a la que todos nos enfrentamos en ese momento, pues tenemos que decidir nuestro rumbo laboral. Vinieron demasiadas interrogantes a mi cabeza: ¿Es esta mi vocación?, ¿Ahora a qué me voy a dedicar?, ¿Seré buena nutrióloga?, y miles de preguntas sin sus respuestas.

 Durante la carrera, tuve mi primer trabajo como niñera, mis tardes se llenaban de risas y juegos y fui muy feliz. Pero al terminar la licenciatura, sabía que debía enfrentarme al primer trabajo fuera de mis comodidades, así que se me presentó una oportunidad y no dudé en tomarla.

Ambos trabajos y ahora el actual, no se han relacionado ni un poquito con mis estudios. Sin embargo, aunque llevo un año trabajando en un área completamente diferente a las anteriores, tuve la suerte de llegar a un lugar en donde me dan la libertad de expresarme y de explotar mis habilidades y capacidades que sinceramente desconocía que tenía. 

No todos tenemos las mismas capacidades, pero todos tenemos esa o esas en las que destacamos más y son justo estas las que debemos aprovechar. 

Me di cuenta, que son pocas las veces que nos cuestionamos cuáles son nuestras habilidades. Puede que hacer una suma en Excel se nos dificulte mucho, pero usar el editor de fotografías nos parece sencillo; y eso sólo lo sabremos si probamos. No todos tenemos las mismas capacidades, pero todos tenemos esa o esas en las que destacamos más y son justo estas las que debemos aprovechar.  

Es por eso, que ahora entiendo la importancia de siempre preguntarse:

1. ¿Cuáles son mis habilidades? – Aquello que soy capaz de realizar.

2. ¿Cuáles mis capacidades? – El potencial que tengo para aprender a hacer.

3. ¿Qué me distingue de las otras personas? – Pienso en eso para lo que otras personas me piden ayuda o consejos, o en actividades para las que me delegan responsabilidades.

Muchas veces nos damos cuenta de nuestra ventaja competitiva hasta que otras personas nos hacen preguntas o nos dan un espacio y oportunidades para hacer cosas diferentes. Es por eso que en EXUS hemos desarrollado una herramienta con preguntas que te llevarán a conocerte mejor y a identificar aquello que te distingue de los demás y te puede llevar a brillar.

 Así como yo lo he hecho, te invito a atreverte a hacer cosas nuevas.  Conócete, valórate, quiérete y disfruta tu camino hasta lograr tus metas. ¡Atrévete a innovar!